El Uso de la Coma

¿Qué es la coma? 

La coma es un signo de puntuación que indica una pausa de corta duración dentro de una oración o enunciado.

Esa cualidad la hace parecerse a muchos otros signos de nuestro idioma que también añaden pausas en los textos, como por ejemplo el punto y el punto y coma.

A pesar de eso, hay una notable diferencia en la duración de la pausa. 

Si juntamos los tres signos en orden de menor a mayor se hace más fácil entenderlo:

Coma: indica una pausa breve.

Punto y coma: representa una pausa de mediana duración.

Punto: indica una pausa larga (sea cual sea el tipo de punto).

Reglas de puntuación de la coma

Las reglas de la coma son más reducidas que las de otros signos que también usamos mucho al escribir, lo cual facilita en gran medida su aprendizaje.

En total tenemos tres:

  • Va unida a la palabra o signo que viene antes.
  • Va separada de la palabra o signo que viene después.
  • Va seguida por minúscula.
  • Va unida a la palabra o signo que viene antes

La coma tiene que ir unida a cualquier signo o palabra que esté antes de ella en una oración, sea cual sea: 

“En la luz de la luna pude ver un extraño reflejo, aunque existe la posibilidad de que fuera solo un sueño” (correcto).

“En la luz de la luna pude ver un extraño reflejo, aunque existe la posibilidad de que fuera solo un sueño” (incorrecto).

“Quisiera comprarme un nuevo ordenador (tal como hizo tu hermano), una mesa y una silla de oficina” (correcto).

“Quisiera comprarme un nuevo ordenador (tal como hizo tu hermano), una mesa y una silla de oficina” (incorrecto).

Va separada de la palabra o signo que viene después:

Contrariamente a la regla anterior, la coma siempre tiene que estar separada por un espacio de cualquier palabra o signo que venga después de ella:

 “La coronación de Carlos V como emperador fue un suceso que cambió a Europa, ya que su poderío abarcaba buena parte del continente” (correcto).

“La coronación de Carlos V como emperador fue un suceso que cambió a Europa, ya que su poderío abarcaba buena parte del continente” (incorrecto).

“Sin embargo, (lo siguiente es solo suposición mía) podría ser posible que nunca hubiese acudido a la reunión” (correcto).

“Sin embargo, (lo siguiente es solo suposición mía) podría ser posible que nunca hubiese acudido a la reunión” (incorrecto).

Va seguida por minúscula:

Toda palabra que coloquemos luego de una coma debe estar en minúsculas, a menos que se trate de un sustantivo o nombre propio:

“Dentro de los postulados hubo errores, todos relacionados con el fundamento teórico utilizado”: aquí la palabra “todos” es un sustantivo común, así que va en minúsculas.

“En su nueva obra sobre la historia de Perú, Carlos Botero plantea un origen distinto al indígena”: en este caso “Carlos” es un nombre propio, de modo que debemos colocarlo en mayúsculas por regla general.

¿Para qué sirve la coma?

 La coma sirve para dos cosas: establecer pausas cortas y separar segmentos de la oración.

Lo primero ya lo establecimos más arriba. La pausa de la coma es breve, así que al leer un texto debemos detenernos solo unos segundos cuando nos la encontremos.

La segunda función implica una separación más relacionada con el sentido dentro de las oraciones. Esto se basa en que en ciertos casos una coma puede permitirnos cambiar el significado por completo.

 Sea como sea, ambas funciones se dividen en varios grupos de usos. Pasemos a estudiarlos uno por uno, para que te sea más fácil aprenderlos.

Para añadir incisos:

 Las comas pueden servir para añadir incisos dentro de cualquier párrafo o texto. Lo que hace específicamente es separarlos del resto del enunciado, para evitar confusiones.

En ese sentido, hay que usar una coma delante del inciso en cuestión y otra luego de él:

  • “En la academia de Madrid, la misma a la que mi padre se empeñaba en mandarme, descubrieron un gran nivel de corrupción entre los directores de la institución”.

Esta función la podrían cumplir también el paréntesis y la raya, aunque si haces eso el inciso quedaría aún más aislado del texto.

Por supuesto dentro de este grupo podemos encontrar varios usos específicos:

Con aposiciones:

Una aposición es una oración o enunciado que aporta una información al texto anterior a ella. Esto sirve para especificar de quién o de qué se está hablando:

  • “Alfonso, el beisbolista que todos conocían en el pueblo, era un gran amante del alcohol y de la comida”.

En ese ejemplo la aposición es “el beisbolista que todos conocían en el pueblo”, y le permite al lector identificar quién es Alfonso. Veamos otro caso:

  • “El estéreo inalámbrico, el aparato que permite escuchar música a través del servicio Bluetooth, se ha hecho más cómodo que los auriculares”.

El segundo ejemplo tiene que ver con un objeto y no con una persona, aunque la aposición (“el aparato que…”) sigue funcionando para lo mismo que en el primero.

Con adjetivos explicativos:

 Los adjetivos explicativos son un tipo de adjetivo que permite explicar la causa o razón de algo que se dice en el texto:

  • “Los estudiantes, exhaustos, prefirieron quedarse en sus casas y no ir a la reunión que habían organizado”.

Si nos fijamos bien, el adjetivo “exhaustos” es el motivo por el que los estudiantes decidieron no asistir al encuentro. Esto es posible gracias al inciso. Por eso, si quitamos la coma todo cambia:

  • “Los estudiantes exhaustos prefirieron quedarse en sus casas y no ir a la reunión que habían organizado”.

En ese segundo caso, “exhaustos” no indica ninguna causa o razón tras la acción de los estudiantes, sino que señala que de todos ellos únicamente los que estaban cansados o exhaustos decidieron no ir.

Con comentarios de precisión o explicación:

Los incisos también pueden contener un comentario que precise o explique el mensaje o sentido del texto:

  • “Todos los profesores, hasta los que habían sido siempre muy indiferentes, decidieron sumarse a la protesta de los estudiantes”: en este caso el inciso precisa a un grupo determinado de los docentes para incluirlos en la oración.
  • “El gran problema del país, dijo cierto economista, está en esperar que todo sea gratuito”: aquí el inciso permite explicar o aclarar a quién se debe la afirmación que se hace en el texto.

Con comentarios de accesorio

Algunos incisos pueden ser sencillamente comentarios que no se relacionan con la estructura de la oración que estamos escribiendo, ni tampoco añaden ninguna información importante o fundamental:

  • “El padre de Miguel, ¡qué hombre tan estupendo!, decidió que la fiesta se haría el día martes, para que todos pudiéramos ir”.

Allí el comentario del inciso guarda una cierta relación con el resto del texto. Sin embargo, si lo quitamos no pasa nada, y por eso es un accesorio:

  • “El padre de Miguel decidió que la fiesta se haría el día martes, para que todos pudiéramos ir”: tal como podemos ver, la oración sigue teniendo coherencia y lógica sin el inciso.

Para separar elementos en una oración:

 La coma puede servir también para separar los elementos dentro de una oración o un enunciado. Esto se hace con el fin de que cada uno tenga su espacio en la estructura, y no haya ningún problema con el sentido.