La Teoría Celular

¿Qué es la Teoría Celular?
La teoría celular es uno de los más importantes y centrales postulados del campo de la biología moderna. Plantea que absolutamente todos los seres vivos están compuestos por células. Esto incluye a todos los organismos de nuestro planeta.
Esta teoría, además, describe el rol de las células en la historia evolutiva de la vida en el planeta. A partir de ello explica las principales características de los seres vivientes.
La teoría celular revolucionó para siempre la manera en que el ser humano comprende la vida y la organiza. En consecuencia, abrió numerosos campos del saber especializado y resolviendo muchos de los interrogantes sobre su cuerpo y el de los animales, que lo acompañaban desde épocas antiguas.
A partir de su demostración, esta teoría arrojó luces sobre el origen de la vida y sobre la reproducción. Además, permitió comprender las dinámicas y los procesos propios de la que hoy se considera la unidad fisiológica más básica de la biología: la célula.
¿En qué consiste la Teoría Celular?
La teoría celular, como dijimos antes, centró los esfuerzos de la biología en la célula como estructura mínima de la vida. Entiende que toda forma de vida está basada en la célula, es decir que todos los tejidos de las plantas, animales y hongos pueden ser descompuestos en células individuales, aunque únicas y diferenciadas.
Sin embargo, las células de los animales, las células de las plantas o las células de los organismos unicelulares son muy diferentes entre sí. Además, esta perspectiva nos permitió entender la gigantesca diversidad celular que existe, no sólo entre las formas de vida primitiva y unicelular, sino incluso dentro de nuestro propio cuerpo.
Por otro lado, todos los estudios respecto a los procesos básicos de la vida, como nacer, crecer, reproducirse y morir, no sólo pueden rastrearse hasta el nivel celular del organismo, sino que además se dan, a su vez, en cada una de las células del cuerpo.
Principios de la Teoría Celular
Los principios que rigen la teoría celular son, a groso modo, los mismos de la biología moderna. Esto implica la distinción entre lo viva y lo inerte: la materia viva es capaz de metabolizar (nutrirse) y auto perpetuarse (reproducirse), para lo cual debe contar con las estructuras necesarias, presentes en el interior de la célula.
Otro principio importante es el de la herencia: la transmisión de la información biológica a los descendientes permite la persistencia de una especie. Este proceso también depende de importantes estructuras celulares, como es el núcleo celular, donde está contenido el ADN de la especie entera.
Por último, las células se juntan en los organismos multicelulares para formar tejidos, que son estructuras mayores y homogéneas de células del mismo tipo. Al hacerlo obedecen a criterios de diversificación importantes, como son los que separan células nerviosas, musculares, hepáticas, etc.
La teoría celular puede reducirse a tres postulados fundamentales:
- Todos los seres vivientes están compuestos por células. Por lo tanto, éstas son la unidad mínima funcional de la vida, en sus distintos niveles de complejidad estructural. Una célula basta para constituir un organismo (unicelular), pero muchas células pueden organizarse en colonias o en un mismo organismo (multicelular) único, diversificando sus funciones y alcanzando un margen de interdependencia muy elevado.
- Las funciones vitales de los organismos tienen lugar dentro de las células. Mediante procesos bioquímicos, y son controlados por sustancias que las células secretan. Cada célula opera como un sistema abierto único, que intercambia materia y energía con su entorno de manera controlada. Además, en cada célula de un organismo se dan las mismas funciones vitales que en el organismo entero: nacimiento, crecimiento, reproducción, muerte.
- Todas las células que existen proceden de otras células anteriores. Por división celular o por formación a partir de células madre. Las células más antiguas y primitivas del mundo son las procariotas (sin núcleo celular).