Consejos Prácticos para mejorar el rendimiento escolar de nuestros niños y niñas.

¿Tu hijo o hija tuvo problemas con sus materias y calificaciones en el último ciclo escolar?

¿No sabes cómo lograr que el niño o niña mejore sus notas?

No te preocupes, aquí te brindamos algunos tips para que tu hijo o hija mejore su rendimiento escolar:

Investiga cuál es la razón de las malas notas

El primer paso es encontrar la razón por la cual tu hijo o hija está teniendo un bajo rendimiento escolar. Las causas de las malas notas se pueden relacionar con diversas índoles y es muy importante saber interpretar los síntomas de estos problemas:

Métodos de estudio y aprendizaje poco eficientes. 
Cada niño y niña aprende de distintas formas: algunos memorizan muy fácilmente datos y fórmulas, otros son más visuales, y otros aprenden mejor a través de historias.

Problemas emocionales.
Quizá tu familia esté pasando por un momento complicado y necesites reforzar el cariño y la confianza en tu hijo o hija.

Alguna necesidad especial de aprendizaje.
Según el Informe Warnok, un niño o niña con necesidades especiales de aprendizaje es aquel que requiere atención y recursos educativos específicos, distintos de los que necesitan los demás compañeros.

Para detectar cualquiera de los 3 casos, es importante que observes el comportamiento de tu hijo o hija y hables con él sin regaños.

Establece horarios y un lugar de estudio.

Tú mejor que nadie conoces la rutina y los horarios de tu hijo e hija, aprovecha esto para establecer horarios ideales en los que el niño y la niña se encuentre mentalmente activo y escoge un espacio libre de distracciones que pudieran robar su concentración.

Enséñale a tu hijo diferentes métodos de estudio

Puedes iniciar enseñando las herramientas que mejor te resultaban a ti en tus años de estudiante: mapas mentales a partir de lecturas, leer mientras se subraya lo más importante para posteriormente hacer un resumen, hacer fichas de estudio; lo que sea necesario para romper con el tedio y la forma tradicional de estudiar, y realizar tareas que claramente no están siendo efectivas para el rendimiento escolar de tu hijo o hija.